Apareció un
fantasma en mi casa. Lo que estoy a punto de contar está supeditado a las ganas
que tengan de creerme, pero yo les juro, en mi casa había un fantasma.
Resulta que
a veces me da miedo dormir sola, porque escucho ruidos que vienen de afuera y pienso
que va a entrar alguien por la terraza para violarme. La mayoría de las veces
tardo en entender que los ruidos vienen de lejos, pero aún después de eso sigo
teniendo miedo, y doy gracias a la niña que llevo dentro por haber mudado a
Chiche conmigo. Chiche es mi oso de peluche y lo abrazo sin vergüenza mientras
duermo (salvo cuando comparto la cama con G, en ese caso tiro a Chiche al piso
y pienso que le estoy siendo infiel. Eso sí me da vergüenza).
Durante
varias noches tuve más miedo de lo normal, escuchaba más ruidos, veía sombras, me
sentía inquieta. Creí que estaba sugestionada, y probablemente lo estaba, pero
no podía lidiar con el susto y me dio insomnio. Un día, cuando después de
infinitas vueltas logré dormirme, tuve pesadillas. Soñé que había alguien en mi
casa, estaba ahí, adentro, escondido esperando el momento. Yo buscaba y no lo
encontraba, pero estaba segura y escuchaba su risa. De pronto apareció una
compañera de trabajo, me sacudía por los hombros y me decía desesperada “despertate,
hay algo en tu casa pero no es lo que vos pensás, despertate”. Y me desperté
pegando un salto en la cama, toda transpirada sin entender si había estado
soñando o pensando. Miré el reloj, 4:33am. Me quedé acostada a oscuras, petrificada
con los ojos muy abiertos y agudizando el oído, podía escuchar mis propios
latidos. Sentí la presencia en mi habitación, no puedo explicarlo, pero supe que
no era una persona y que si había algo no iba a ser precisamente agradable. Pensé
en salir corriendo, en llamar a mi mamá, en gritar. Me quedé inmóvil en la
cama. Esperé a que pasara algo.
Y ahí
estaba, una especie de energía que se me metió en el cuerpo entero entrando por
un costado y saliendo por el otro, dos veces, de izquierda a derecha y de
derecha a izquierda, como un escaner, un zumbido muy fuerte que seguía ese
movimiento y una vibración intensa. No puedo describirlo de otra manera, fue
una sensación que no puedo comparar con ninguna otra que alguna vez haya tenido,
sólo sé que fue horrible. Y después nada, nada de nada, el aire era más liviano
y lo que fuera que había pasado no podía explicarlo. Me aseguré de que estaba
despierta. Estaba muy despierta.
No sé cómo
hice para volver a dormirme pero lo logré. Al día siguiente en el trabajo no
pude aguantarme las ganas y decidí enfrentar la posibilidad de que todos
pensaran que estaba loca, lo conté. Para mi sorpresa a nadie le pareció
extraño, cada uno tenía su propia historia. Me hicieron preguntas. ¿Se te están
cayendo las cosas en tu casa? Sí, se cae todo, los adornos, las sillas, hasta se
me rompió una fuente. ¿Se te mueren las plantas? Sí, empezó con una planta que
Gladys cambió de lugar y después se empezaron a secar todas. ¿Se te tapan las
cañerías? Sí, de hecho tuve que llamar al plomero dos veces en quince días
porque se tapa el inodoro. ¿Te despertás a las 4:30? Sí, cómo sabés. Porque a
esa hora hacen rituales de umbanda, mucha gente se despierta, dijeron, tenés
algo. Después le hicieron preguntas a un péndulo del tipo ¿hay mal de ojo? ¿magia
negra? ¿fue Gladys? Parece que si se mueve en círculos significa que sí.
A esa
altura yo ya no sabía que pensar. Qué creer. O mejor dicho si creer o no. Las
que rezan que recen por mi, concluí, y me pidieron mis datos completos porque
conocen gente que me puede limpiar.
Decidí no
pensar más en el asunto, me lo imaginé, no tengo nada en mi casa, es una
locura, no puede ser, esas cosas no pasan, creo que una vez vi ovnis en San
Luis con mi ex novio y otra vez soñé que algunos muertos me decían cosas, pero esto
es distinto, esto no pasa.
Esa noche
lo obligué a G a que durmiera conmigo, y a la noche siguiente y la otra. Él
pensaba que era una boludez, pero igual se quedó.
Nunca más
pasó nada semejante.
Tampoco se
siguieron cayendo cosas, el inodoro no se volvió a tapar y mágicamente revivieron
todas las plantas.
A veces me sigo despertando a las 4:30, estiro el brazo, lo agarro a Chiche y me tapo
la cabeza con la frazada.
Por las
dudas.
10 comentarios:
Qué loco!!! no?
Un abrazo.
Dani..
A mi me pasa cada vez que me despierto en la noche, siento que alguien me aprieta, por más fuerza que haga no puedo soltarme, durará entre 10 o 15 segundos interminables.
Nunca lo dije, pero un día mi hermana se quebró y me contó que sentía que alguien la apretaba contra la cama y no la dejaba moverse, cuando yo le conté lo mismo pensó que la estaba boludeando. A mi mamá también le pasaba, pero de manera distinta y mucho antes que nosotras.
Al tiempito, las 3, yo, mi mamá y mi hermana nos pasaba lo mismo.
Al principio me asusté mal porque es horrible. Después para que no me traten de loca, lo hablé con una amiga, al pedo porque me trató de loca igual, y me dijo que seguramente estaba soñando. Mmmm ahí empecé a pensar que así era, hasta que me pasó una tarde, mientras dormía la siesta, me desperté de un zarpado apretón, y pude mantener los ojos abiertos, viendo la fuerza que hacía mi cuerpo para soltarse y no lograrlo, y al mismo tiempo, ver que no había absolutamente nada arriba mío.
En fin, loca no estás. Qué es, andá a saber. Pero loca no estás.
Ah, otra cosa, casate con G. Un hombre que haga esas cosas como limpiar mejor que una Gladys, vale oro.
Dato: la hora contraria es 03:30 hs. Supuestamente salen todos a festejar la muerte de jesus que murio 15:30 supuestamente. Nada, eso.
Un san benito en la puerta que satisfaga la superstición. Total, en una de esas es posta que el san benito protege de este tipo de cosas.
No se, digo.
Danila
Ringgg....
En verdad he venido a buscarte...
Te envío mi abrazo.
Dani..
¿No será que era una excusa (inconsciente, digamos) tuya para que G viviera con vos?
Igual lo que contás te lo creo, y da un poco de miedo. A mi me pasa siempre que confundo, en los sueño la bolsa de pan con los muertos, desde chico.
Una vez lo vi a mi hermano que se asomaba detrás de la puerta de la cocina, donde estaba la bolsa de pan colgada. Mi hermano me esperaba detrás de la puerta para asustarme. Entonces se asomó y me mostró los dientes, yo corrí a mi pieza cagandome de risa, y cuando llegué mi hermano estaba ahí. Fue terrible, se me empezaron a salir los mocos del cagazo, yo era chiquito, pero para mí, el que estaba detrás de la puerta era un niño muerto. A veces sueño eso, que veo una bolsa de pan y la confundo con la figura de algún familiar fallecido. Un abrazo. Muy lindos tus relatos.
creo que llegue tarde, saludos igualmente
Te extraño!!!
Sería lindo saber de vos...
Sólo espero te encuentres bien
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